Esto va de dentistas

Navidad 2022 Marina de Oteo

De dentistas y de recomendaciones. Porque piénsalo… cuando estás buscando un profesional para solucionar un problema que tienes, buena parte de la decisión final está en la recomendación que te hayan hecho tus amigos, ¿a que sí?

Te voy a poner un ejemplo: hace un año más o menos, tuve que buscar un nuevo dentista porque al que yo iba desde hacía muchos años se jubiló, y yo tenía varios problemas pendientes de solucionar. Así que me puse manos a la obra. Ya que tenía que buscar a un nuevo profesional de confianza, iba a buscarlo cerquita de mi casa y que me diera la misma confianza que había tenido hasta el momento con el anterior.

Pregunté a muchos de mis amigos, hice una selección, los visité pidiendo su opinión y presupuesto para la solución de mis problemas dentales y al final elegí a uno de ellos. El que más confianza me transmitió y precisamente no el más barato. Cuando fui a solucionar mi problema más urgente, me reafirmé en mi elección: realmente era un buen profesional, que sabía lo que hacía y lo hacía bien y además se mantenía al día en todas las técnicas y equipamiento técnico. Y encima es un tío majísimo que le encanta su trabajo y lo sabe transmitir, y todo eso, en la consulta de un dentista en la que normalmente me tenso más que una cuerda de violín. Pero no, el sabe cómo transmitir paz y calma.

Hace poco me fui a hacer una férula de descarga, que era lo último que tenía pendiente por hacer y otra vez volví a reafirmarme en que había hecho la elección correcta: estuvo una hora y media entera y verdadera ajustándome la férula para que fuera perfecta. Y explicándome qué era lo que iba haciendo por el camino. Eso te digo yo que no lo hace cualquiera.

Y es que cuando un buen profesional de cualquier ámbito es bueno y te soluciona tus problemas con solvencia y buen hacer, lo quieres compartir con el mundo. Porque se lo merece. Aunque no sea el más barato. Porque su trabajo lo vale y te hace la vida más fácil. ¿A que si?

Pues yo, además de mi dentista, te voy a recomendar a una persona que ha trabajado conmigo para ayudarme a elaborar y crecer en mi marca personal. Te puedo asegurar que no me paga, no me llevo nada de nada, pero estoy tan contenta con el trabajo que hemos hecho juntas, en cómo ha captado mi esencia, como se ha adaptado a mis ritmos, mis tiempos, mi momento profesional y muchas más cosas… que no puedo hacer otra cosa más que recomendarla. Se llama Arantxa Isidoro (https://arantxaisidoro.com/) y seguro que algo bueno sacas de ella, de su newsletter (que yo sigo) y de su trabajo si en algún momento te decides a contratarla.

Vuelvo a repetir: no me llevo nada de nada, ni de Arantxa ni de mi dentista. Pero si quieres que te recomiende a alguien, estate segura que siempre va a ser desde el absoluto convencimiento.

Ojalá tú también me recomiendes a mi desde ese mismo punto: el convencimiento de que estás llevando a tu amigo a la puerta de alguien que no le va a defraudar.

 

P.D. No pierdas el paso. Estamos ya a mitad de noviembre y se terminan las fechas para las fotos Navideñas.

P.D.2. La foto de hoy no acompaña al texto, pero es que se nos escurre el tiempo entre los dedos y si no vienes ya a hacer tus fotos de Navidad, no van a llegar a tiempo para felicitar a los tuyos.

Leave a comment